España es el país que más variedad posee en cuanto a embutidos se refiere, siendo el Jamón Ibérico y Jamón Serrano los más famosos y deseados. Su gran trayectoria a lo largo de la historia han conseguido una excelente especialización y refinamiento de los procesos de elaboración.
Ahora bien, normalmente resulta difícil diferenciar, desde el punto de vista sensorial, entre los distintos tipos de jamones existentes en el mercado cuando no somos expertos. Distinguir entre un jamón ibérico de bellota y un jamón curado procedente de cerdo blanco resulta más fácil, pero hacerlo entre un jamón ibérico de bellota y un jamón ibérico de cebo resulta bastante complicado. Por eso, es importante conocer dichas diferencias puesto que a la hora de comprar estos productos el precio varía.
Dicho esto, es interesante dar unas breves nociones sobre las cualidades principales que poseen el jamón ibérico y jamón serrano y sus principales diferencias.
❧ Jamón Ibérico
Este tipo de jamón proviene del cerdo que es criado en libertad. Son cerdos de alta calidad ya que no se reciben una alimentación alterada para que engorden más rápido. Su sabor es más intenso que el del Jamón Serrano y además, contiene menos grasa.
Se pueden hacer dos distinciones entre este tipo de jamón. Según la raza y según la alimentación.
- ➨ En cuanto a la raza
– Jamón 100% Ibérico: Es el que proviene de un cerdo de padres 100% ibéricos.
– Jamón Ibérico: Es el que proviene de un cerdo de madre 100% ibérica y de un padre, resultado de una madre 100% ibérica y padre cruzado con cerdo Duroc.
- ➨ En cuanto a la alimentación
– Jamón Ibérico de Bellota: Proviene de un cerdo ibérico criado en libertad y alimentado con pastos naturales y bellotas.
– Jamón Ibérico de Cebo de Campo: Proviene de un cerdo ibérico criado en libertad y alimentado con pastos naturales y pienso.
– Jamón Ibérico de Cebo: Proviene de un cerdo ibérico criado en granjas y alimentado con piensos de cereales y legumbres.
❧ Jamón Serrano
El Jamón Serrano es el que se obtiene del cerdo de capa blanca, el cual es criado en granja y alimentado con piensos y cereales. El sabor de este tipo de jamón no es tan intenso como el ibérico, pero posee una buena relación calidad-precio.
Según su proceso de curación, existen diferentes clases de Jamón Serrano. El mínimo de curación es de 7 meses, pudiéndose alcanzar hasta los 24 meses.
– Plata: De 8 a 11 meses de curación.
– Oro: De 11 a 14 meses de curación.
– Gran Serrano: Más de 14 meses de curación.
